En América se comercializa también una versión más deportiva de 335 CV, el Crossfire SRT-6.
El modelo biplaza actual del Chrysler Crossfire permite abrir y cerrar la capota con tan solo pulsar un botón. El motor de 3,2 litros acelera de 0 a 100 en 6,9 segundos. Un difusor en los bajos de la carrocería y un spoiler desplegable se encargan de aumentar la adherencia a la calzada a altas velocidades. Si se pisa el freno a fondo, las grandes ruedas, suministradas de serie, recorren un tramo de 36,5 metros antes de pasar de 100 Km/h a 0.
El amplio equipamiento de serie incluye, entre otros, ajuste eléctrico en los asientos de conductor y copiloto, calefacción de dos niveles en los asientos, airbag principal y lateral para conductor y copiloto, ABS, ASR, BAS y EPS. Al maletero del Chrysler Crossfire también puede accederse desde el habitáculo, aunque sólo ofrece 275 litros de capacidad, resultando relativamente pequeño. El consumo del Chrysler alcanza un promedio de 10,4 litros cada 100 kilómetros, su consumo urbano es todavía mayor, llegando a los 14,4 litros.