Volvo ha resucitado de forma inesperada la denominación XC70, descontinuada en 2016, con un enfoque completamente nuevo. El modelo original, una berlina familiar sobreelevada (que en realidad empezó llamándose V70 XC y fue una evolución del 850), da paso a un D-SUV con cerca de 4,8 metros de longitud, el cual estará destinado al mercado chino inicialmente.
Este curiosísimo relanzamiento se posiciona, como resulta evidente conociendo la clasificación de nomenclaturas de la marca sueca, por encima del XC60 en dimensiones, y adopta un sistema de propulsión híbrido enchufable de gran autonomía. De hecho, es la mejor de entre los PHEV que se venden actualmente en Europa, una región donde todavía se desconoce si se venderá.
Tecnología híbrida de vanguardia, nueva plataforma y posible primo en Lynk & Co desde 2024
El XC70 2026 que llegará de manera inminente a China (salvo sorpresa, lo hará antes de que finalice el presente ejercicio) incorpora un sistema de propulsión híbrido enchufable donde el motor eléctrico es el principal encargado de la tarea de impulsión, mientras que el motor de gasolina actúa principalmente (también podría mover el coche) como generador para recargar la batería que alimenta al primero. Se considera, por tanto, un PHEV de autonomía extendida que funciona tanto en serie como en paralelo. El BYD Seal U DM-i usa una tecnología similar.
Según Volvo, la autonomía eléctrica en el ciclo CLTC que habitualmente se usa en China es de 200 kilómetros, lo que se traduciría en aproximadamente 160 o 170 con el procedimiento de homologación WLTP que se emplea en nuestras latitudes, más realista. Esto, en cualquier caso, superaría notablemente a todos los competidores actuales, incluyendo el Mercedes-Benz GLC 300 e 4MATIC, que declara 127 kilómetros teóricos. Con un rango de alcance tan alto es viable realizar la gran mayoría de trayectos sin emisiones, pero a la hora de llevar a cabo muy largos viajes, la unidad térmica respalda y da seguridad.
Adicionalmente, este modelo es el primero de Volvo en utilizar la nueva plataforma Scalable Modular Architecture (SMA), diseñada específicamente para sistemas de propulsión híbridos enchufables por el grupo automovilístico chino Geely, propietario de la firma nórdica desde ya hace 15 años. Esta arquitectura permite, entre otras cosas, una mayor flexibilidad en el diseño y la integración de tecnologías avanzadas. Sobre el primero de esos dos puntos, su aspecto, lo cierto es que las primeras imágenes disponibles del XC70 moderno muestran algunos rasgos, volúmenes, proporciones y formas que recuerdan considerablemente a la tercera y última generación del modelo, comercializada desde 2007.
Cabe mencionar que la citada multinacional asiática, Geely, ya cuenta con un modelo similar en su amplísimo catálogo: el Lynk & Co 08. Este SUV mide 4,82 metros de largo y combina un par de potentes motores eléctricos (218 CV delante y 212 CV detrás) con otro de gasolina (163 CV). Su batería es de 39,6 kWh. La similitud sugiere que el XC70 podría compartir componentes o tecnologías con este modelo, pero esto es algo que, en todo caso, deben confirmar en Volvo. Sea como fuere, con este lanzamiento, los escandinavos no solo revirirán una denominación histórica, sino que también refuerzan su compromiso con la electrificación y, sí, con los SUV.
