Renovarse para seguir en la cima. Mazda presenta la una nueva generación de su SUV líder en ventas, con una renovación integral y más sustanciosa de lo que a simple vista parece. A su rediseño exterior se suma una mejor habitabilidad interior, la integración de Google en su sistema multimedia y, en general, una apuesta por la continuidad con el modelo anterior en su enfoque de SUV familiar con unas líneas elegantes y atractivas, una buena respuesta dinámica y una elevada calidad percibida en el interior.
Adiós al diésel
Una de las diferencias más notables respecto a su predecesor es el cambio en la gama de motores. En la versión anterior, el CX-5 estaba disponible en versión diésel de 2,2 litros y 184 cv y gasolina de 2.0 litros microhíbrido, además del 2,5 litros e-Skyactiv. En este nuevo modelo, sólo estará disponible, al menos por el momento, la motorización de 2.5 L e-Skyactive, con el sistema de apoyo híbrido de 24 V, que arroja menor potencia que el anterior modelo, unos 141 CV.
Este 2,5 litros atmosférico, desarrollado por Mazda en Japón y puesto a punto en su sede de Alemania, para adaptarse a la conducción europea, busca una mejora en la respuesta en bajas y medias revoluciones, con una mejora del par por debajo de las 4.500 rpm hasta del 19%, según datos oficiales.
No menos importante es la desaparición del excelente cambio manual de Mazda en este nuevo CX-5, que se ofrecerá únicamente con transmisión automática. Esta transmisión de seis velocidades se ha recalibrado para reducir la frecuencia de los cambios y para ajustar su comportamiento según las preferencias del conductor. Además, el nuevo CX-5 maximiza la eficiencia al desconectar dos de sus cuatro cilindros cuando las condiciones de carga lo permiten, para un menor consumo y emisiones.
Las suspensiones también se han revisado, con barras estabilizadoras más grandes, muelles más blandos y amortiguadores con una mayor acción de rebote. Todo ello se combina con neumáticos de mayor agarre y menor fricción que mejora el comportamiento dinámico del coche.
Por otra parte, en función del acabado elegido por el cliente, el vehículo puede incorporar sistema de tracción total o no. La versión de acceso, Prime-line, sólo está disponible con tracción delantera, por la tracción total de las versiones Centre-Line, Exclusive-Line y la versión top, Homura. En estas tres últimas, el sistema de tracción integral i-ACTIV AWD de Mazda distribuye el par entre ambos ejes de manera automática en función de las condiciones de conducción.
El nuevo Mazda CX-5 crece en tamaño
Más grande, más cómodo. El nuevo Mazda CX-5 mide 4,69 metros de longitud, 1,86 m de anchura y 1,69 m de altura, con una distancia entre ejes de 2,81 metros. El aumento de batalla y longitud (+ 115 mm) implica un mayor espacio interior y más comodidad para los pasajeros. Además, las puertas traseras son más anchas para mejorar el acceso, también es más alto, con 3 cm más de altura interior (con los asientos plegados) y 4,5 cm de largo en las mismas condiciones.
También se ha agrandado el portón trasero y se ha rebajado su altura al suelo, lo que se traduce en una mayor comodidad a la hora de acceder a la zona de carga, que, debido a todos los aumentos de las dimensiones generales del vehículo, haya visto aumentada su capacidad de carga en 61 litros respecto a la versión anterior alcanzando un total de 583 litros. Por otra parte, la banqueta trasera, aunque puede abatirse, no se desplaza longitudinalmente.
Equipamiento
La vida en el interior del CX-5 es uno de sus puntos fuertes. Los elegantes acabados de la marca estarán presentes en todas sus versiones, aunque la calidad de los mismos y sus opciones variarán, especialmente en cuanto a tapicería. En todas ellas, eso sí, el vehículo tendrá Google integrado, con la IA Gemini incluida, que hace que el conductor pueda comunicarse con voz sin necesidad de pronunciar unos parámetros concretos. Todas las versiones también contarán con conectividad con Apple CarPlay y Android Auto (mediante cable en la versión básica, inalámbrico en las demás), y un sistema de sonido de 8 altavoces.
A partir de la versión Centre-Line, contará con Head up display, y portón trasero eléctrico. Las versiones Exclusive-Line y Homura tendrán la opción de techo panorámico, asientos traseros calefactados de serie, y un mejor sistema de sonido Bose de 12 altavoces. Además, el acabado Homura ofrece manos libres y una pantalla táctil de mayores dimensiones, de 15,6 pulgadas frente a las 12,9 de las versiones inferiores, con interfaz personalizable.
En cuanto al diseño exterior, los cambios en las dimensiones hacen que el vehículo gane en presencia: Es más largo, es más alto en su parte delantera, y según el fabricante, mejora la visibilidad de la conducción y la sensación de seguridad. Además, la actualización estética del frontal otorga un aire más vanguardista.
El acabado Prime-Line cuenta con llantas de aleación de 17 pulgadas, y de 19 de color negro en las tres versiones superiores. Desde Mazda aseguran que están trabajando en la incorporación de más diseños de llantas para la gama, que por el momento, sólo cuenta con estos dos, únicos para cada versión.
Por último, el CX-5 estará disponible en 8 colores, según detalla Mazda, uno de los cuales será un tono totalmente nuevo en la gama.
Con todos estos cambios, Mazda espera repetir el éxito en ventas de su SUV mediano, del que han conseguido vender casi 5 millones de unidades a nivel mundial desde la aparición de su primera generación en 2012.
Este nuevo modelo estará disponible a partir de finales de 2025, aceptándose pedidos desde julio y con un precio base de 32.500 euros, para un coche pensado para el confort para toda la familia y el desempeño tanto dentro como fuera de la ciudad.