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Reportaje: Honda Civic – ¿4 o 5 puertas? ¿Cuál interesa más?

Hace aproximadamente un año, Honda presentó la décima generación de uno de los coches más famosos y exitosos del segmento C, el Civic.

Estamos ante un auténtico icono de deportividad, diseño y fiabilidad nacido en 1972 y que, después de cuatro décadas, ha vendido 24 millones de unidades por todo el mundo. La última generación, que completa la gama con las versiones Type R y 1.6 i-DTEC, se ofrece con dos carrocerías de cuatro y cinco puertas. Dos opciones con conceptos distintos y cada una con sus propias ventajas. ¿Cuál elegir? Te ayudamos a decidirte… Para quien no lo sepa, el Civic es sin duda el modelo más importante en la historia de Honda. No solo por los volúmenes de venta que ha alcanzado sino porque, en algunos momentos de la historia de la marca, ha servido de base para crear otros productos con mucho peso específico, como el CR-V, el Prelude o el CR-X. En este enlace puedes encontrar información sobre estos modelos, así como ofertas de vehículos en el mercado de ocasión.

En esta última generación, la décima, la carrocería sigue ofreciendo un estilo agresivo y deportivo, pero bastante diferente a la anterior generación, perdiendo esa forma característica de ‘nave espacial’ y pasando a convertirse en una berlina con todas las de la ley. El Civic es ahora más bajo, más ancho y más largo, con las ventajas que eso trae de cara a la habitabilidad, y ofrece una conducción más deportiva y un aspecto muy estilizado sin renunciar a la comodidad.

Con carrocerías de 4,51 (5 puertas) y 4,63 metros de largo (4 puertas), estamos hablando de uno de los compactos de más longitud dentro del segmento C, por encima de competidores como el Volkswagen Golf, el Hyundai i30, el Seat Leon o el Mazda 3.

Nuevo diésel y dos gasolina

Empecemos por lo más novedoso. Tanto el sedán como el hatchback de la décima generación están disponibles (a partir de marzo) con el nuevo motor diésel 1.6 i-DTEC. Después de años de trabajo y de una poderosa inversión económica, el objetivo de Honda era encontrar el equilibrio entre la deportividad clásica de un Civic y la eficiencia que tanto la sociedad como la legislación exigen a los motores diésel. Así, Honda ha logrado un gran equilibrio partiendo del mismo motor 1.6 de 120 CV que ya tenía, pero con numerosas mejoras para llegar a conseguir consumos de 3.4 l/100 Km en el caso del sedán y 3.5 l/100 Km en el caso del cinco puertas. Aquí tienes toda la información sobre este motor (target=undefined).

Si hablamos de motores de gasolina, la gama del Civic pone dos bloques a disposición de los clientes, un tricilindrico 1.0 Turbo VTEC de 129 cv (disponible solo en el cinco puertas) y un 1.5 Turbo VTEC de 182 (disponible tanto en cuatro como en cinco puertas). El primero de ellos ofrece una entrega de potencia suave pero bastante enérgica para ser un motor de tres cilindros. Su consumo homologado no supera los 5 litros (4,7 / 4,8 dependiendo de si el cambio es manual o automático).

En el caso del motor más potente, el 1.5 VTEC de 182 cv, es importante mencionar que emplea algunos componentes y tecnologías procedentes del deportivo Type R (como el turbo, pistones, bielas, tren de válvulas, etc.) que permiten contar con una buena dosis de potencia sin disparar los consumos. El resultado que deja esta bloque es un Civic muy dinámico, obviamente mucho más modesto que el Type R, pero que garantiza buenas dosis de diversión en curvas tanto por la buena respuesta del motor como el equilibrio y firmeza de su chasis. Es capaz de generar 182 CV a 5.500 rpm (a 6.000 rpm si lo equipamos con cambio automático CVT) y cuenta con un par máximo de 240 newtons/metro (220 con automático). En ambas carrocerías el consumo homologado es de 5,7 litros.

Dimensiones, ¿en qué se diferencian?

El Honda Civic 5 puertas es notablemente más grande en esta décima generación. Mide 4,51 metros de largo (13 más), 1,79 de ancho (3 más) y 1,43 de alto (2 menos). Lo que Honda ha querido buscar con estas nuevas dimensiones es darle un aspecto más firme y grande a la carrocería y al mismo tiempo mejorar la aerodinámica y el aplomo en curva. Al ser más ancho y más bajo, la sensación dinámica es la de un coche superior.

Por su parte, el sedán se diferencia básicamente en la longitud. Mide 4,63 metros de largo, es decir 12 cm más que el hatchback, es igual de ancho (1,79 metros) y también dos centímetros más bajo (1,41). Más allá de que nos guste uno u otro diseño, el conocer bien sus dimensiones nos permitirá inclinar la balanza en favor del cinco puertas si, por ejemplo, tenemos una plaza de aparcamiento pequeña o si debemos realizar maniobras habitualmente en espacios reducidos.

El sedán también tiene alguna que otra particularidad. Por ejemplo, es un poco más bajo y por tanto el acceso puede ser un poco más complicado para personas de talla más elevada. Sin embargo, al añadir un tercer volumen a su carrocería, la aerodinámica se ve un poco favorecida. Esto no afecta de ninguna manera a nivel de sensaciones o de conducción, pero sí afecta a los consumos homologados, pudiendo arañar una décima en el caso del motor diésel y fijar un excelente consumo mixto de 3,4 litros, mejorando los 3,5 del cinco puertas.

El sedán tiene más maletero. Pero el hatchback es más fácil de cargar

Una de las principales diferencias se produce a nivel de capacidad de carga. Aunque el sedán ofrece bastante más maletero en términos absolutos (519 litros frente a los 414 del hatchback), lo cierto es que la maniobra de carga es algo más compleja porque, al ser la boca de carga de tipo cofre, el hueco es más estrecho y debemos agacharnos e introducir el brazo hasta el final para colocar la carga al fondo.

Esto no presenta especiales inconvenientes si solo vamos a colocar maletas, pero si vamos a transportar con frecuencia objetos anchos o voluminosos (como una bici, aunque sea desmontada, o cajas) quizá hay que dar prioridad a la facilidad de carga del cinco puertas frente a la capacidad del sedán. Hay que tener en cuenta también que al abatir los asientos del hatchback se dispone de todo el espacio libre hasta los asientos delanteros, cosa que en el otro no ocurre ya que el espacio entre maletero y habitáculo siempre quedará dividido.

En cuanto a la comodidad ofrecida dentro del habitáculo, podríamos decir que ambos mejoran notablemente con respecto a la generación anterior debido al aumento en las dimensiones del coche. Esta evolución se nota especialmente en anchura y en el espacio para las piernas, dejando ahora espacio para que tres ocupantes puedan viajar bastante cómodos en la banqueta trasera.

Más seguros y rígidos

Honda ha logrado implantar en esta nueva generación, materiales ligeros y de gran resistencia con el objetivo de aportar a la carrocería una mayor seguridad en caso de accidente y una mayor rigidez en caso de posibles impactos. Es más, el acero estampado en caliente está en unas proporciones mucho mayores que en la pasada producción. En el Civic 5 puertas, se ha aumentado del 6% al 12% y en el caso del Sedán se ha aumentado del 1% al 14%. Claramente el sedán ha sido el mayor beneficiado en esta nueva generación.

A nivel dinámico, una gran diferencia entre uno y otro es que el cinco puertas puede equipar el sistema de suspensión adaptativa donde el conductor podrá seleccionar entre dos modos para ajustar la firmeza de amortiguación según las condiciones de conducción. Los modos son Normal y Dinámico, y ambos se han diseñado para mejorar el grado de estabilidad en la conducción en función de por donde circulemos. Lo que sí es común a ambas carrocerías es el modo de conducción económica ECON, que pulsando un botón al lado de la palanca de cambios modifica algunos parámetros en la electrónica para maximizar el ahorro de combustible.

Mucha seguridad y conectividad

El Civic de 5 puertas cuentas con seis acabados diferentes, mientras que en el caso del sedán la elección es algo más sencilla con tres terminaciones. Desde el acabado más básico se incluyen equipamientos muy interesantes, como el paquete de seguridad Honda Sensing y el de conectividad Honda Connect.

RAZONES DE COMPRA DE UNO Y OTRO

  • Honda CIVIC 4 Puertas
  • Honda CIVIC 5 puertas

Diseño más conservador

Mejor aerodinámica

Mayor capacidad de maletero

Mejor espacio para las piernas

Más motores a elegir

Mayor facilidad de carga del maletero

Aspecto más deportivo

Más niveles de equipamiento

Suspensión adaptativa

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Por un lado, el Honda Sensing incluye valiosos sistemas de seguridad activa como el mantenimiento de carril, control de crucero adaptativo, el limitador de velocidad inteligente, avisador de cambio involuntario de carril y ayuda en frenada de emergencia. Por el lado de la conectividad, también se incluye de serie a partir del segundo nivel de equipamiento el Honda Connect, el cual incluye una pantalla táctil de 7 pulgadas y los clásicos Apple Car Play y Android Auto.

Precio y decisión

El precio de partida del Honda Civic es de 20.400 euros, un precio correspondiente al motor 1.0 Turbo de 129 cv que, recordemos, no está disponible en la versión sedán. Para comparar una carrocería y otra con los mismos motores tendremos que saltar hasta el 1.5 Turbo 182 cv Sport, que arranca en los 25.100 euros con carrocería de cinco puertas. Este mismo motor cuesta 23.100 euros con carrocería de cuatro puertas y acabado Comfort.

Para hacer una comparativa fiel y adecuada, vamos a comparar los precios de las motorizaciones diésel y sus versiones más básicas (Comfort). El cinco puertas tiene un coste de partida de 23.550 euros en su versión Comfort mientras que el Sedán partirá de 24.850 euros. Un precio menor para el cinco puertas que además cuenta con un acabado más, el tope de gama Executive Premium que costará 29.650 euros mientras que el tope de gama del Sedán, el Executive, estará en 29.950 euros.

Con todo y con esto, cada uno puede elegir qué opción le interesa más en función de su uso y gustos. Por precio, por acabado, por motor o por diseño, estos dos Honda Civic no defraudan en su décima generación.

¿Preparado para lo siguiente?

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