La sexta generación del Renault Espace ya está a la venta desde 43.500 euros. Lo más destacable del nuevo modelo es que, a diferencia de las cinco generaciones anteriores, deja atrás la tradicional carrocería de monovolumen para unirse a las ventajas comerciales que hoy en día aportan los SUV. Por lo tanto, estamos ante un nuevo todocamino familiar que se basa en el nuevo Austral para mejorar tecnológica y dinámicamente.

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Un solo motor híbrido de 200 CV para el nuevo Espace

Como el Austral, se fabrica en la planta española de Palencia y tiene como esqueleto la plataforma CMF-CD, que aporta mucho más equilibrio y agilidad a la conducción. Además, permite la introducción de propulsores electrificados. De hecho, la única alternativa que por el momento contempla es una versión híbrida no enchufable de 200 CV que se constituye de un 1.5 tricilíndrico de 130 CV y dos motores eléctricos más (uno de ellos, de 70 CV, es capaz de mover el conjunto por sí solo a baja velocidad.)

Durante la toma de contacto que tuvimos con el nuevo Espace por los alrededores de Oporto pudimos corroborar tanto el salto adelante en materia de comportamiento dinámico (es un coche muy cómodo y bastante más estable en conducción alegre que un Peugeot 5008, por ejemplo) como el buen funcionamiento de la mecánica híbrida que, no obstante, ya habíamos probado en el Austral. Eso sí, a pesar de su buena respuesta y de su eficiencia, lo cierto es que se seguirá quedando algo lejos de ofrecer unos consumos como los homologados: las cifras oficiales se quedan por debajo de los 5 l/100 km y los reales, superan los 7 litros.

5 y 7 plazas disponibles

En cualquier caso, como decimos, las sensaciones generales son muy positivas. También lo son cuando entramos al interior, en el que destaca una enorme pantalla con servicios conectados de Google y una calidad percibida muy buena. El espacio es formidable para cinco adultos, ya que la longitud y la distancia entre ejes crecen en comparación con un Austral (20 y 6 cm, respectivamente, hasta los 4,72 y 2,74 m), pero la tercera fila de asientos se quedará prácticamente reservada a niños pequeños.

El maletero varía su capacidad en función de la colocación de las banquetas de la segunda fila de asientos (son corredizas en torno a 20 cm) y en base a si necesitamos las 7 plazas o incluso solo dos. De este modo, podemos tener 159, 477, 677 o hasta 1.714 litros.

La gama se compone de tres acabados, Techno (43.500 euros), Esprit Alpine (46.000 euros) e Iconic (48.000 euros), y ya desde el más básico tenemos de serie elementos como la cámara de visión trasera, las barras de techo, los faros full led, la iluminación ambiental del habitáculo, los diferentes modos de conducción del Multi-Sense (Perso, Eco, Confort y Sport), el detector de ángulo muerto y la prevención de cambio de carril involuntario, el detector de fatiga, el reconocimiento de señales de tráfico, el cargador de smartphone por inducción, la pantalla central táctil de 12 pulgadas con navegación y conectividad o el volante de cuero, entre otros.

Sistema 4Control casi obligatorio

Lo que solo añaden los dos niveles superiores, algo que es bastante recomendable porque mejora la maniobrabilidad, la facilidad de conducción y el confort a bordo, es el sistema 4Control Advanced con eje trasero multibrazo y direccional. Además de ganar dinamismo y comodidad, nos facilita los aparcamientos, gracias a que las ruedas traseras giran hasta los 5º.

Como conclusión, con esta nueva generación del Espace los clientes obtienen un modelo más tecnológico, seguro, eficiente y práctico, aunque renuncian por ello a un cierto espíritu familiar que estaba más arraigado a la carrocería tradicional.