El Tesla Cybertruck ya es una realidad. Aunque le ha llevado su tiempo (se presentó por primera vez hace casi un lustro), desde hace algunos meses ya ruedan unidades por las carreteras norteamericanas. Y lo cierto es que, además de su particular imagen y de sus innegables dotes prestacionales, este modelo ha nacido con una curiosa característica: la de equipar el parabrisas más grande del mundo en un automóvil de serie.
El Tesla Cybertruck es el coche con el parabrisas más grande
Hasta ahora ese honor recaía sobre otro Tesla, el Model X, cuyo parabrisas panorámico “Big Sky” hace gala de una superficie de 2,87 m2. Sin embargo, desde la aparición en escena del Cybertruck, su cristal frontal pulverizó el récord de su hermano con un gigantesco parabrisas que mide 1,80 metros de longitud y 1,75 metros de anchura en su parte más ancha; presentando una superficie que roza los 3 m2.
Dejando de lado sus dimensiones, ambas lunas son muy diferentes entre sí: la del Model X tiene unas formas mucho más curvas y se extiende hacia el techo, ofreciendo una visibilidad, una luminosidad y una sensación de espacio únicas; mientras que la del Cybertruck es mucho más inclinada y cuenta con más ángulos rectos.
El parabrisas es esencial como elemento de seguridad
Para Elon Musk, CEO de Tesla, "el parabrisas del Model X ofrece una experiencia de conducción única, similar a la que se experimenta en la cabina de un helicóptero." Por su parte, el del Cybertruck está diseñado para que sea más resistente y, debido a su tamaño, también incorpora un tintado doble que evita deslumbramientos por el sol.
Lo que está claro es que los dos modelos tienen en su parabrisas una gran baza y que Elon Musk no da puntada sin hilo: recordemos que este es un elemento fundamental para la seguridad, ya que llega a aportar hasta el 30% de la resistencia estructural de un automóvil. Por lo tanto, el magnate sudafricano vuelve a dar en el clavo cuando se desmarca del resto de sus rivales desarrollando una luna tan especial y particular.
