
A menudo los diseñadores deben escuchar que sus automóviles tienen un aspecto sencillo, demasiado sobrio, poco atractivo; resumiendo, demasiado aburrido. Sin embargo, a más tardar transcurridos unos cuantos años, este diseño sencillo ha valido la pena.

Los descapotables ya no son solo para el verano, o por lo menos eso es lo que dicen los fabricantes. Ellos tratan de convertir estos objetos de deseo en bonitos coupés con unos trabajados techos retráctiles.

Para cualquier cosa. El Eos es lo más resultón de Volskwagen porque tiene un comportamiento muy próximo al de un Golf con el valor añadido de ser convertible. Conscientes de su desventaja por el factor precio, la marca alemana ha añadido otro motor FSI a la gama para hacerlo más asequible.