Y por si eso fuera poco, el Auris estrena nueva imagen y habitáculo al tiempo que mejora considerablemente su confort de marcha.   Cuando en 2012 Ford se atrevió a sacar un motor de gasolina de pequeña cilindrada, ligero y muy eficiente que pudiera arrebatarle ventas a los diésel, muchos de los gurús se llevaron las manos a la cabeza pensando en la locura que acababan de cometer. Sin embargo, casi un lustro después, el éxito comercial ha avalado la arriesgada apuesta. Ahora bien, esta victoria no se mide por el número de ventas, que han sido muchas, sino por el impacto que provocó en el sector. Sí, porque el pequeño 1.0 EcoBoost de Ford se convirtió en el espejo en el que querían reflejarse el resto de fabricantes.

Así es como hemos asistido a la nueva generación de motores turboalimentados de reducida cilindrada, consumos contenidos y niveles de potencia elevados. Algunos han tardado más que otros, pero al final han acabado sucumbiendo. Toyota ha sido uno de esas marcas que se ha demorado más de la cuenta en sacar al mercado un motor turboalimentado de pequeña cilindrada. Sin embargo, la japonesa tiene la ‘excusa’ de haber centrado sus esfuerzos en la hibridación, un sistema de propulsión que le ha dado un importante número de ventas.

Más afinado

Una tecnología que provocó un cierto abandono hacia las mecánicas de gasolina. Sí, porque el compacto nipón era un compacto sin defectos, a no ser que tuviera bajo el capó un propulsor de gasolina. Hasta hace bien poco, su gama estaba formada por dos alternativas, un 1.33 y un 1.6 que, en comparación con los motores de sus rivales, se quedaban muy atrás tanto en prestaciones como en refinamiento, sin hablar claro está de consumos o emisiones. Hasta ahora…

En efecto, Toyota ha sabido rectificar a tiempo y subirse al tren de la turboalimentación. Para ello, ha desarrollado un nuevo bloque perteneciente a la familia Estec (acrónimo de “Economy with Superior Thermal Efficient Combustion”, o lo que es lo mismo economía con una combustión de superior eficiencia térmica). Para que nos entendáis, que la marca ha decidido aplicar todos sus conocimientos sobre los procesos de combustión para así lograr que sus motores de gasolina registren unos consumos de combustible muy bajos.

• Ficha Técnica Toyota Auris 120T

Motor: Gasolina, cuatro cilindros en línea

Cilindrada: 1.197 cc

Potencia: 116 CV entre 5.200-5.600 rpm

Par: 185 Nm entre 1.500-4.000 rpm

Velocidad Máxima: 200 km/h

0-100 km/h: 10,1 seg.

Consumo (urbano/extraurb./mixto): 6,5 / 4,8 / 5,4 l/100 km

Emisiones CO2: 125 gr/km

Dimensiones: 4.330 / 1.760/ 1.475 metros

Maletero: 360-1.199 litros

Peso: 1.265 kg.

Cambio: Manual de seis velocidades

Depósito: 50 litros

Precio: 24.110 euros

Precio Ud probada: 26.610 euros

Para lograrlo, Toyota no ha optado por un bloque tricilíndrico como el de Ford, sino que ha preferido una arquitectura clásica de cuatro cilindros, que resulta más refinada. Sí presenta una cilindrada reducida, de 1.197 cc, lo cual no resulta un impedimento para que acabe generando la misma potencia, 116 CV, que el motor al que sustituye, el 1.6 litros. Este compacto motor incorpora numerosas tecnologías como inyección directa, doble Reglaje Variable Inteligente de Válvulas Amplio (VVT-iW), culata con puerto de alta inclinación y colector de escape integrado, comando de válvulas ligero, sistema de inyección de aceite con control variable y colector de admisión y conducciones de admisión de resina.

El resultado: un Auris que responde perfectamente desde un régimen de vueltas bajo gracias a los 185 Nm de par que están disponibles desde las 1.500 vueltas. Bien es cierto que por debajo de ese régimen, se muestra algo perezoso, pero a su favor está la escasa rumorosidad y vibraciones que se filtran al habitáculo cuando el motor funciona en un régimen bajo de revoluciones.

Nuestra unidad se encontraba asociada a la caja de cambios manual de seis relaciones, con un tacto suave y preciso que le permite registrar un consumo medio cercano a los 6 l/100 km. Un dato que no dista demasiado de los 5,4 litros homologados por la marca y que, en unión a un depósito de combustible de 50 litros, nos permitirá recorrer cerca de 833 kilómetros sin repostar.

Equilibrio perfecto

Ya en marcha, este nuevo Auris también parece haber dado un salto cualitativo. Volvemos a incidir en lo refinado de su mecánica, casi imperceptible en todo momento, a excepción de las largas aceleraciones. Este nuevo modelo apuesta por una suspensión trasera multibrazo, generando un confort de marcha más elevado, al tiempo que la delantera, McPherson, ha sido revisada ligeramente. Todo ello se traduce en un vehículo muy confortable y bien sujeto. La carrocería no da síntomas de balanceo, ni siquiera en tramos más revirados, mientras que la dirección ha mejorado y ahora ofrece un tacto más rápido y preciso.

En materia de seguridad, destaca el Toyota Safety Sense, un paquete de seguridad que cuesta 700 euros pero que merece la pena incluir en nuestro vehículo. Más aún si tenemos en cuenta el amplio abanico de asistentes a la conducción que aglutina, entre los que se encuentran el control inteligente de luces de carretera, el lector de señales de tráfico, el avisador por cambio involuntario de carril o el sistema de precolisión.

Gana en atractivo

Un nuevo pack de seguridad que se encarga de completar una actualización estética que ha originado que el nuevo Auris entre por los ojos. Sí, los diseñadores nipones parecen haberse puesto las pilas para equiparar su compacto al resto de sus rivales. Así, con el último restyling, tanto los Auris de cinco puertas como los familiares (Touring Sport) reciben nuevos paragolpes, colores exteriores, juegos de llantas de aleación, pilotos con tecnología LED... Y desde el acabado Feel!, el que equipa nuestra unidad, se suman faros delanteros con tecnología Full LED.

Ya en el habitáculo nos encontramos con el mismo aire moderno de su exterior. Aparecen nuevos relojes con una pantalla central más grande y con más contraste, los mandos de la climatización pasan a ser táctiles (un hecho que al principio nos desagradaba pero que con el paso de los días nos ha ido cautivando) y, sobre todo, equipa una nueva pantalla central táctil. Tiene 7 pulgadas y su manejo resulta sencillo e intuitivo desde el primer momento. El único pero que encontramos sea quizá la orientación de la misma pues con un par de grados de giro ya nos hubiera dejado contentos… más todavía.