El Honda HR-V es uno de los modelos más interesantes de los que la marca japonesa comercializa en nuestro mercado. Este SUV destaca sobre todo por su inteligente aprovechamiento del espacio interior, con un habitáculo en el que 5 adultos pueden viajar con mucha más holgura de lo habitual en coches de sus dinensiones, y también por la eficiencia de su sistema híbrido, que logra unas excelentes cifras de consumo.

Además de estas dos virtudes principales, el Honda HR-V es un coche muy fácil de conducir, lo cual nos resta estrés en el día a día y aumemta la seguridad en medio del tráfico.

Honda HR-V: agradable sin estridencias

Aunque los modelos de Honda a veces tienen formas muy peculiares, como las últimas generaciones del Civic o el Honda e, en el HR-V nos encontramos un coche que se percibe moderno por detalles como los faros full led o la forma de la parrilla delantera sin marco, pero que no tiene un diseño controvertido. Esto hace que no sea espectacular y guste a la mayoría.

Los acabados y ajustes de la carrocería son buenos y además resultan muy prácticas sus puertas, que abren un ángulo muy bueno y también dejan un gran hueco de acceso, sobre todo en el caso del portón trasero.

Los faros delanteros son full led con luz adaptativa de largas a cruce. Su funcionamiento es correcto.

No hay demasiadas posibilidades de personalización en cuanto a colores y diseño de las llantas, lo cual puede ser un inconveniente para los que busquen un coceh más ajustado a sus gustos, pero para muchos clientes es una ventaja no tener que romperse demasiado la cabeza en catálogos que pueden llegar a ser tediosos.

Honda HR-V: un híbrido eficaz

El sistema híbrido que mueve al HR-V es muy original y es un desarrollo de Honda que resulta muy eficaz en este modelo, así como en el Jazz. El grupo propulsor está compuesto por un motor de gasolina de ciclo Atkinson de alto rendimiento termodinámico. Estos motores funcionan muy bien a regímenes y cargas constantes, pero no tanto cuando les pedimos que varíen de velocidad o de carga.

Por este motivo, en el Honda HR-V el motor de gasolina se usa principalmente para mover un generador eléctrico, que no obliga a cambiar tanto de revoluciones ni de carga al motor. Sólo en determinadas situaciones el motor de gasolina del HR-V se acopla a las ruedas.

Junto a este motor de gasolina tenemos otro motor, en este caso eléctrico. Éste será el que principalmente mueva las ruedas, ya sea porque usa la energía disponible en las baterías (100% eléctrico) o bien la que produce el motor de gasolina (híbrido serie). Este motor a veces funciona también con el motor de gasolina acoplado a las ruedas para ayudarle a empujar a baja velocidad, puesto que el Honda HR-V no tiene caja de cambios sino que sólo tiene una única relación de cambio. En estas condiciones es un híbrido en paralelo.

Para terminar, tenemos las baterías de alta tensión y un generador eléctrico. El conjunto es muy eficaz y está diseñado para que el motor de gasolina funcione lo mínimo imprescindible. Sobre todo en ciudad, casi siempre circularemos en modo eléctrico o usando muy poco el de combustión. Esto se traduce en unos consumos muy ajustados.

En concreto, los consumos reales del HR-V durante esta prueba han sido:

• Ciudad: 3,5 l/100 km
• Carretera: 3,7 l/100 km
• Autopista: 6 l/100 km

Honda HR-V: súper práctico

Sin lugar a dudas, una de las mayores virtudes del Honda HR-V es que es un coche practiquísimo. No hay ningún modelo de su tamaño que ofrezca su espacio interior, con unas plazas traseras que no encontraremos ni siquiera en modelos 40 cm más largos que éste.

Los asientos delanteros son muy confortables y la postura de conducción agradable. El diseño es atractivo, con formas modernas y agradables y muy buenos materiales y ajustes que evitan los ruidos parásitos. La instrumentación es completa y los mandos quedan a mano.

Las plazas traseras del Honda HR-V son excelentes, con un acceso muy cómodo, muchísimo espacio para las piernas y la versatilidad envidiable gracias al sistema Magic Seats de Honda. El depósito de gasolina va debajo del asiento del conductor, de modo que queda sitio en el suelo trasero para poder configurar unos asientos que, cuando los abates, además de bajar el respaldo se baja también la banqueta, lo que deja un suelo muy plano de carga. Si lo preferimos, por ejemplo para llevar un bulto alto, podemos dejar el respaldo levantado y elevar la banqueta, como en las butacas de los cines. De esta forma tenemos desde el suelo del coche hasta el techo para llevar, por ejemplo, una planta.

El maletero es muy espacioso, con formas muy aprovechables y, por su gran cantidad de posibles configuraciones, está claro que es uno de los coches más prácticos del mercado.

Honda HR-V: fácil de conducir sin marchas

A la hora de conducir el Honda HR-V llama la atención su homogeneidad. Es un coche muy fácil de llevar, que no hace cosas raras ni cogerá al conductor a traición.

La dirección tiene un tacto suave, los frenos se dosifican bien y tienen unas buenas distancias de detención y las suspensiones filtran bien los baches a la vez que mantienen el balanceo de la carrocería en curva dentro de los márgenes razonables.

Las reacciones del coche son seguras en todo momento y, pese a lo complicado del sistema híbrido, su conducción es sencilla y natural.

No es un coche pensado para enamorar a los fans de la velocidad, pero cumple sobradamente y no hacen falta más caballos con las carreteras plagadas de radares y sin poder pasar de 90 km/h en ellas o de 120 en las autovías que pronto serán de peaje.

Honda HR-V: ¿vale lo que cuesta?

Aunque el precio del Honda HR-V asusta un poco en un coche de este segmento, tampoco es tan exagerado cuando vemos su equipamiento.

En el campo de la seguridad activa y asistencias avanzadas a la conducción, el Honda HR-V dispone de sensores de ángulo muerto, control de crucero adaptativo, alerta de colisión con frenado de emergencia, sistema de mantenimiento en el carril, etc.

En cuanto a confort, disponemos de climatizador de doble zona, asientos calefactados, acceso con llave inteligente manos libres, volante de cuero multifunción, etc.

Por último, la conectividad, también a buen nivel al contar con Apple Car Play y Android Auto, puerto de carga inalámbrico, tomas de conexión USB...