Volkswagen continúa preparando el terreno para su próxima generación de coches eléctricos con el ID. Cross Concept, un prototipo que anticipa el papel que tendrá el SUV de entrada a la familia ID. en 2026. El objetivo del fabricante alemán es reforzar su presencia en los segmentos pequeños y compactos, y lo hará con una batería de lanzamientos que incluye los futuros ID. Polo, ID. Polo GTI y ID. EVERY1.

Dentro de esa estrategia, el ID. Cross Concept adopta el formato SUV para convertirse en la alternativa más versátil y con mayor capacidad interior, tomando como referencia conceptual al T-Cross, aunque completamente reformulado como coche eléctrico.

Diseño del Volkswagen ID. Cross Concept

El ID. Cross Concept estrena el lenguaje de diseño Pure Positive, una filosofía que apuesta por la simplicidad visual y la estabilidad de formas, con una imagen amable pero muy identificable como Volkswagen. El frontal combina unos faros Matrix IQ.LIGHT con una franja luminosa que cruza el logotipo central iluminado, creando un gesto más expresivo de lo habitual en un SUV urbano. Las líneas rectas de la carrocería y la zona acristalada muy horizontal buscan dar sensación de orden y solidez sin recurrir a volúmenes exagerados.

El efecto de techo flotante se consigue gracias a los pilares pintados en negro brillante, un detalle que estiliza la silueta y la acerca al lenguaje visual del ID. Buzz. El pilar C, muy vertical y apoyado visualmente sobre la rueda trasera, es un guiño directo a iconos de la marca como el Golf y el histórico autobús VW. En el concept aparece acompañado por unas aletas horizontales retroiluminadas que no llegarán al modelo de producción, pero que ayudan a reforzar esa conexión con el legado de Volkswagen.

Uno de los elementos más destacados del diseño son las llantas Balboa de 21 pulgadas, desarrolladas específicamente para este prototipo. Combina radios en color “Golden Dusk” con secciones aerodinámicas en negro “Nature Black” pensadas para guiar mejor el flujo de aire alrededor de la rueda. Incluso los neumáticos Goodyear 235/40 R21 prolongan parte del patrón de la llanta en el propio flanco, un detalle puramente conceptual que añade presencia y subraya la intención técnica del diseño.

A nivel de proporciones, el ID. Cross Concept mide 4.161 mm de largo, 1,84 m de ancho y 1,59 m de alto, medidas muy cercanas a las del T-Cross, aunque la arquitectura eléctrica permite voladizos más cortos y un interior mucho más aprovechado.

En la parte trasera, el emblema iluminado no solo actúa como firma visual, sino que también integra el botón para abrir el portón. El maletero alcanza 450 litros, complementados con un pequeño frunk de 25 litros bajo el capó delantero, pensado para el cable de carga u objetos que conviene tener siempre a mano.

Interior del Volkswagen ID. Cross Concept

Volkswagen ha querido alejar el interior del ID. Cross Concept de la estética fría típica de algunos eléctricos y ha apostado por un ambiente cálido y casi doméstico. Predomina el tono “Vanilla Chai”, acompañado del tejido bouclé “Daisy”, muy suave al tacto y aplicado en asientos, puertas y parte del salpicadero. La marca ya ha confirmado que el modelo de producción mantendrá esta atmósfera, aunque con materiales más ajustados al coste final.

La plataforma MEB+ permite un suelo completamente plano y una distribución interior más eficiente. La sensación de amplitud en las plazas traseras es mayor de lo esperado para un SUV urbano. Los asientos, además, pueden abatirse por completo, creando una superficie completamente plana. Es un detalle pensado para momentos de descanso en viajes o actividades al aire libre y, según Volkswagen, una de las ideas que quieren mantener en el modelo definitivo.

La consola central flotante integra dos cargadores inalámbricos para el teléfono móvil y un mando giratorio que da acceso rápido a funciones del vehículo. La digitalización se apoya en dos pantallas, una de 11 pulgadas para la instrumentación y otra de 13 pulgadas para el infoentretenimiento, alineadas visualmente para facilitar la lectura. La climatización mantiene botones físicos retroiluminados, una decisión que añade facilidad de uso y evita depender completamente de los menús táctiles.

A todo ello se suma una evolución de la iluminación inteligente de Volkswagen. La conocida ID. Light, que hasta ahora recorría únicamente la base del parabrisas en otros modelos ID., añade aquí tiras luminosas también en las puertas delanteras. Este sistema utiliza señales visuales y sonoras para apoyar indicaciones de navegación o avisos de seguridad, de una manera intuitiva y fácil de interpretar.

Otro gesto curioso lo encontramos en el soporte de carga del smartphone: si el conductor deja el móvil boca abajo, el coche entiende que se quiere reducir la distracción y activa un modo de calma. En ese momento, las pantallas simplifican la información al mínimo imprescindible y dejan como protagonista un fondo con paisajes animados que cambian según la hora del día o el clima exterior. Es un guiño más a esa idea de interior pensado para relajarse, no solo para conducir.

A ello se suman los modos “Atmospheres”, que ajustan iluminación, sonido y climatización para generar diferentes ambientes interiores. Las pantallas muestran motivos vegetales animados que cambian según la hora del día, reforzando la sensación de un habitáculo pensado para ser un espacio de descanso más que un simple puesto de conducción.

Motor y prestaciones del Volkswagen ID. Cross Concept

El prototipo equipa un motor eléctrico delantero de 211 CV (155 kW) asociado a una batería de 56 kWh, con una autonomía teórica de hasta 420 km WLTP. Volkswagen ya ha adelantado que la gama del modelo de producción incluirá versiones más asequibles con menos potencia y baterías de menor capacidad para lograr ese precio objetivo cercano a los 20.000 euros.

A pesar de su tamaño, el ID. Cross Concept mantiene un enfoque práctico, puede remolcar hasta 1.200 kg y soporta 75 kg de carga vertical en el enganche, lo que permite transportar dos bicicletas eléctricas sin complicaciones.

De la breve toma de contacto que pude realizar, apenas unos metros en una zona cerrada, lo que más destacaría es la visibilidad que hay desde el puesto del conductor, sin apenas puntos ciegos.

La base técnica es la plataforma MEB+, que estrenará una nueva generación de software, motores y baterías. Permitirá integrar asistentes más avanzados, actualizaciones remotas más completas y funciones heredadas de modelos de segmentos superiores. Será también la estructura utilizada por los próximos ID. Polo y por otros eléctricos de acceso del grupo.