El compromiso medioambiental de Suzuki es una realidad. Desde 2019 toda la gama de la firma nipona está electrificada con excepción del Jimny, el cual además ha pasado a formar parte del segmento de los vehículos mixtos para así poder seguir vigente. Una gama, compuesta por nada menos que seis modelos y siete versiones que, hoy en día, toca todos los ‘palos’ de la electrificación salvo el 100% eléctrico. Tecnología que, ojo, estará presente en la marca japonesa antes de lo que creemos pues todo hace indicar que para 2023 podría tener ya disponible su vehículo cero emisiones.
Coincidiendo como es tradición con el Sunshine Tour celebrado en Conil de la Frontera (Cádiz) los dos protagonistas del evento fueron tanto el nuevo S-Cross como el Vitara Strong Hybrid. Ambos lucen la etiqueta ECO aunque, de momento, de manera muy diferente. El primero se ciñe a un sistema Mild- Hybrid de 48 voltios que le dota de la etiqueta ECO y que ayuda a reducir el consumo.
Mismo sello y mismas cualidades que ofrece el Vitara Strong Hybrid con la salvedad de que el motor eléctrico de 33,4 CV que incorpora puede desplazar de manera independiente al coche en determinadas circunstancias. Una de ellas se agradecerá, sobre todo, cuando realizamos conducción todoterreno, donde el Vitara sigue demostrando que es una de las grandes referencias de su categoría. Bajo una lluvia de justicia y un terreno que solo tenía barro, equipado con neumáticos de serie, el todocamino urbano nipón demostró una vez más que pocos modelos ofrecen un sistema de tracción tan eficaz como el AllGrip de Suzuki. Además, la MGU interactúa con el ingenioso sistema de trasmisión automático AGS de 6 velocidades, para minimizar los baches de entrega de potencia al cambiar de marcha y brindar una conducción mucho más confortable.
Trepamuros
Pero si hay un modelo que reúne toda la esencia off road de Suzuki ese es sin duda el Jimny Pro. La suma de este apellido se debe a su reconversión en vehículo comercial (N1), obligando a prescindir de los asientos traseros y limitando su velocidad a 90 km/h cuando rueda por asfalto. No obstante, el terreno natural de este Jimny Pro seguirá siendo el campo. Con mucho más barro que en el circuito del Vitara, el Jimny demostró que no hay obstáculo que le impida seguir avanzando, ya sea un cruce de puentes con cero agarre, una pared vertical o una bajada pronunciada.