El SEAT Toledo Marathon es más que un coche clásico; es la historia de una ambición desenfrenada. A principios de los años 90, cuando el SEAT Toledo dominaba las carreteras españolas como sedán familiar, la marca decidió reinterpretarlo como un prototipo de competición 4x4 diseñado para el rally más duro del mundo: el París-Dakar. Sin embargo la crisis del petróleo y la creación de una nueva factoría en Martorell terminaron con el proyecto Dakar antes de tiempo.

Ingeniería extrema: un Prototipo nacido para el desierto

El Toledo Marathon (1993) fue la máxima expresión de la deportividad de SEAT en ese momento. Aunque compartía nombre con el modelo de calle, sus entrañas eran pura competición.

El equipo de SEAT Sport no se limitó a modificar el sedán de serie. En su lugar, construyeron una máquina radical: La carrocería del Toledo se montó sobre un chasis tubular específico, diseñado para soportar las tensiones extremas del desierto. Esto significaba que la rigidez y la protección del piloto eran prioritarias. Bajo el capó, no había un motor SEAT convencional. Utilizaba un robusto motor Audi de 2.119 cc con turbo, el mismo del Audi S1, que entregaba unos impresionantes 330 CV a 5.000 rpm y un par de 500 Nm.

Esta potencia se canalizaba a través de un sistema de tracción total permanente (4x4), esencial para la tracción en las dunas. El peso estaba optimizado y a pesar de su apariencia robusta, el prototipo pesaba solo 1.300 kg, una cifra notablemente baja para un coche de su categoría en el Dakar, lo que contribuía a su agilidad y velocidad en terreno roto.

Esta bestia de tracción integral fue el buque insignia de la marca española en el rally raid y tenía que poner a prueba la capacidad de su ingeniería en la arena africana.

El legado de SEAT Sport en el Rally Dakar

La creación del SEAT Toledo Marathon se enmarca en un momento crucial para SEAT Sport, la división de competición de la marca. Buscaban un escaparate global que demostrara su capacidad tecnológica y fiabilidad, y no había escenario más exigente que el Dakar.

El prototipo fue pilotado por leyendas del rally, dejando una huella imborrable en el automovilismo español. Aunque el Dakar es una prueba de eliminación, la sola presencia y el rendimiento del Toledo Marathon sirvieron para cimentar la reputación de SEAT en el deporte del motor, abriendo el camino para futuros éxitos en otras disciplinas.

¡Revive la Historia!

No te pierdas el vídeo completo para ver el SEAT Toledo Marathon en acción y escuchar la historia de este prototipo contada por Isidre López, el responsable de Seat Históricos, un verdadero tesoro del automovilismo español que marcó el inicio de una época dorada de Sear en la competición a nivel mundial.