Que la expansión de SEAT en el segmento de los SUV va increscendo es un hecho que se ha confirmado con el Tarraco. Pues bien, ahora la firma española da varios pasos hacia adelante al ser el primero en incluir el Gas Natural Comprimido (GNC) en un vehículo de este segmento.

El encargado de tal hito no es otro que el Arona. El todocamino urbano de SEAT pasa a engrosar la lista de modelos que se alimentan con GNC dentro de la firma nacional, tras el Mii, León e Ibiza. Precisamente, el derivar de este último es lo que le ha permitido poder ofrecer las siglas TGI en esta versión y, según ellos, beneficiar al conductor con un ahorro del 50% en el coste por kilómetro en comparación con un Arona de gasolina.

Bajo el capó se ubica el conocido motor 1.0 TSI de tres cilindros que genera 90 CV, el cual ha sido pertinentemente adaptado para poder circular con GNC. Para ello ofrece nuevos segmentos en cromo-níquel para los pistones, asientos de las válvulas reforzados y válvulas con mayor alzado, así como un turbocompresor más ligero.

Para impulsarlo, el Arona TGI se basta de tres depósitos de gas natural ubicados bajo el piso del maletero, perdiendo así bastante capacidad (de 400 pasa a 282 litros), con una capacidad total de 14,3 kilos. Arranca siempre con GNC y al no existir un conmutador, circulará con el gas hasta que este se agote. En total se estima que podrá cubrir una distancia de 400 kilómetros hasta que entre en acción la gasolina, con la que se podrán realizar otros 160 km adicionales (el depósito es más pequeño que el del resto de Arona).

La recarga se realiza de forma sencilla a través de la toma situada junto a la de gasolina. La seguridad está garantizada gracias a los conductos de gas de acero inoxidable, los sensores de presión de gas y el regulador de presión electrónico que controla la distribución del gas.

Aún no se conocen precios pero sí que el SEAT Arona TGI estará disponible en los mismos acabados que el resto de versiones: Reference, Style, Xcellence y FR, así como con las mismas opciones de personalización.