Este año viene cargado de cambios importantes en el Reglamento General de Circulación. La Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado una serie de cambios en la normativa, que repercutirán tanto a conductores particulares como profesionales. Se trata de medidas que tienen como objetivo mejorar la seguridad vial, disminuir los accidentes y adaptarse a las nuevas realidades de movilidad urbana y cambio climático.
Entre los cambios más polémicos, está la prohibición de adelantar en carreteras convencionales durante episodios de mal tiempo, como lluvias intensas, nieve o niebla espesa. En este caso, la medida afectará en especial a conductores de vehículos pesados y transportes especiales, aunque será obligatoria para todos. Su incumplimiento podrá sancionarse con multas de hasta 200 euros.
Con mal tiempo, normas más estrictas para adelantamientos e iluminación
Respecto al uso de las luces del coche, la DGT también ha puesto mano dura. Ahora, conducir durante el día sin luces de cruce cuando la visibilidad sea baja será sancionable con multa. También habrá un mayor control del uso de las luces antiniebla, que solo podrán usarse en casos estrictamente necesarios. En este último caso, la multa por un uso indebido puede alcanzar los 100 euros.
Por otro lado, se elimina definitivamente el margen de 20 km/h para adelantar en carreteras secundarias. Según la DGT, esta modificación, planteada ya en 2022, se aplicará con el objetivo de promover una conducción más segura y responsable.
Asimismo, las inspecciones rutinarias de los agentes de Tráfico incluirán un control más riguroso del estado de los neumáticos, especialmente en invierno y en zonas montañosas. Circular con neumáticos inadecuados o en mal estado podrá resultar en la inmovilización del vehículo y multas de hasta 500 euros. También se fomentará el uso de neumáticos de invierno o cadenas en condiciones climáticas adversas que dificulten la conducción.
Se refuerza los controles de acceso a las ZBE
A partir de julio, si el vehículo no porta la etiqueta ambiental correspondiente, no se podrá acceder a las zonas de bajas emisiones (ZBE) de ciudades grandes ni municipios de más de 50.000 habitantes. Se trata de otra de las medidas de la DGT que tiene como objetivo endurecer las restricciones a las ZBE, como parte del Plan Nacional de Energía y Clima. Y ojo, porque también se instalarán nuevas cámaras que multarán automáticamente a quienes se salten la norma.
Otra novedad es que, por primera vez, se regulará el uso de vehículos con conducción autónoma de nivel 3, un sistema que permite al coche manejarse solo en ciertas situaciones. Por ahora, solo podrán circular en autopistas o vías rápidas y bajo condiciones muy concretas.