Los diversos fabricantes de automóviles están enfrascados en la creación de los coches más tecnológicos posibles. Se habla de coches eléctricos, de inteligencia artificial, de realidad aumentada y de coches autónomos, pero hay una marca que no descuida sus orígenes y su herencia.
Se trata de Bentley, que está resucitando uno de sus coches más icónicos, el Blower de 1929, con componentes nuevos. Construirá doce ejemplares para clientes elegidos a un precio de 1,5 millones de libras (1,7 millones de euros). Ni que decir tiene que ya están todos vendidos.
Una joya histórica reconstruida hoy
Ahora, estos coches renacidos son fuente de la polémica, pues algunos consideran que es un sacrilegio su nueva fabricación, mientras que otros están encantado.
El Bentley Blower ha sido el más difícil de copiar debido a su antigüedad, explica el director general de Bentley, Adrian Hallmark. El propio Hallmark, que lo ha conducido, apunta que la experiencia es como "la de conducir un Land Rover Serie I sin restaurar que puede alcanzar los 212 km/h”.
El Blower era una versión sobrealimentada del Bentley de 4½ litros construido por Sir Henry "Tim" Birkin. Probablemente fue el más famoso de los Bentley Boys, ese arrogante grupo de corredores de antes de la guerra que conducían rápido, se divertían mucho y ganaron las 24 horas de Le Mans cinco veces entre 1924 y 1930. Sólo se construyeron cuatro Blower de competición, además de 50 coches para clientes.
El Blower "resucitado” es una copia exacta del coche de equipo nº 2, utilizado por Birkin en Le Mans en 1930 y que es propiedad de Bentley y hoy está valorado en unos 25 millones de libras (cerca de 30 millones de euros).
Para su “copia actualizada”, el Blower fue desmontado y cada componente fue escaneado en 3D para crear un modelo digital de todo el coche. A continuación, las piezas "nuevas" se fabricaron en su mayoría de la misma manera que las del coche antiguo, utilizando los moldes, las plantillas y las herramientas manuales originales.
Los proveedores fueron un carrocero de Ludlow para fabricar el bastidor de fresno y un especialista en motores de vapor de 200 años de antigüedad de Derbyshire para moldear a mano el chasis de acero de gran espesor. La división Mulliner de Bentley está montando a mano los 12 coches para clientes.