Y es que el monovolumen compacto japonés cuenta con un reconocimiento mundial mientras que en el Viejo Continente le ha costado arrancar. De ahí que esta tercera entrega sea mucho más atractiva estéticamente, más tecnológica y sobre todo más dinámica. Todo con tal de contentar al cliente europeo. Honda ha realizado profundas modificaciones en la tercera generación de su Jazz (conocido como Fit en otros mercados) para fijar el punto de mira en el mercado europeo. No sólo crece en tamaño, siendo 9,5 cm más largo que su predecesor, hasta los 3,99 metros, sino que también es mucho más habitable gracias a los 3 cm extra que se han ganado en su batalla (2,53 m). De esta forma, el nuevo Jazz se encarama en lo más alto del segmento en lo que a espacio interior se refiere, circunstancia que se refleja, igualmente, en un maletero de grandes dimensiones el cual, con 354 litros, se acerca más al de compactos de más de 4 metros.
Capacidad que puede llegar hasta los 1.314 litros si se abaje la segunda fila de asientos, ofreciendo un suelo plano y que además puede ser complementada gracias a los ya característicos asientos traseros denominados Magic Seat, los cuales cuentan con una banqueta plegable, a modo de butaca de cine, para facilitar el transporte de objetos de hasta 1,30 metros de altura.
Una habitabilidad que se completa con un interior completamente renovado, de más calidad y, sobre todo, muy tecnológico. La consola central se ha orientado hacia el conductor y ahora está presidida por una gran pantalla táctil que puede ser de 5 ó 7 pulgadas y en la que se integra el sistema Honda Connect desde el que podremos controlar varias funciones y que es con Android. Gracias a ello, podremos acceder a múltiples aplicaciones de Internet (noticias, información de tráfico, partes meteorológicos, redes sociales) como sincronizarse con cualquier smartphones a través de MirrorLink, Wi-Fi, Bluetooth, HDMI y USB.
Más dinámico y seguro
Pero además de funcional, esta tercera generación también ha mejorado sustancialmente su parte dinámica para satisfacer las exigentes necesidades del público europeo. Honda ha realizado ajustes tanto en la dirección (eléctrica) como en la suspensión (McPherson delante y barra de torsión detrás).
Mejoras de comportamiento que se completan con un nuevo motor, el gasolina 1.3 i-VTEC de 102 CV a 6.000 rpm y que será el único que conforme la gama del monovolumen urbano japonés. Podrá acoplarse tanto a la caja de cambio manual de seis relaciones como a la automática CVT. En comparación con el 1.4 al que sustituye, este 1.3 i-VTEC gana en ligereza gracias a la incorporación de unos árboles más finos, un cigüeñal un 27% más liviano u otras piezas móviles.
En el capítulo de seguridad, este nuevo Jazz también ofrece importantes novedades. Desde la versión más baja (estará disponible con tres acabados: Trend, Confort y Elegance), el modelo nipón ya cuenta el sistema de frenado en ciudad y, de forma opcional podrá completarse con diferentes asistentes como el control de velocidad, el avisador de colisión frontal, el avisador de cambio involuntario de carril, el sistema de reconocimiento de señales de tráfico o el sistema de luces de carretera automáticas.
Los precios del nuevo Honda Jazz partirán de los 15.900 euros para el acabado más básico mientras que la transmisión automática, disponible para todos los acabados, tendrá un sobrecoste de 1.000 euros.
