La creación del Grupo Stellantis ha supuesto la agrupación de un gran número de marcas bajo un paraguas común y eso, en teoría, ha favorecido a cada uno de los fabricantes que lo componen: sinergias, tecnología compartida, menores costes, etc.
El especialista alemán Irmscher, que históricamente se ha dedicado a tunear modelos de Opel, ha decidido aprovechar que están en el mismo grupo automovilístico y ha puesto sus ojos (y sus manos) en uno de los modelos más populares de la “marca hermana” Fiat.
Edición limitada de 100 unidades del Fiat 500 eléctrico
Ha sido sobre el Fiat 500 eléctrico y la preparación ocupa el hueco todavía no cubierto por Abarth, que aún no ha interpretado bajo sus cánones la nueva generación del utilitario italiano.
Irmscher se ha centrado principalmente en la estética, con el estreno de unas llantas de aleación Turbo Star de 10 radios y 17 pulgadas, disponibles en acabado negro o plateado. Las nuevas ruedas también se combinan con una suspensión rebajada que acerca al Fiat 500 al suelo.
Una gama de adhesivos rojos/negros o plateados enmarcan el morro, mientras que en el lateral contemplamos otro conjunto de adhesivos con la leyenda “Urban by Irmscher”.
En el interior, los cambios incluyen una tapicería de cuero totalmente nueva para los asientos, los paneles de las puertas, el revestimiento del techo y el volante. El cuero puede pedirse en marrón amaretto o rojo vino.
Irmscher no ha anunciado ninguna mejora de rendimiento. Esto significa que el 500 eléctrico, incluso después de pasar por los talleres del tuneador alemán, seguirá contando con una de las dos opciones disponibles de serie. Es decir, con una batería de 24 kWh y un motor eléctrico de 95 CV, o con una batería de 42 kWh y un motor eléctrico de 118 CV.
El especialista alemán ha apuntado que se trata de una edición limitada a 100 unidades y que verá su continuidad en función de la aceptación recibida.