Chevrolet Orlando

Si bien los coreanos debían seguir trabajando en el desarrollo de modelos, fuera del espacio asiático dejarían de estar presentes como marca propia. En lugar de ello, intentarían posicionar de nuevo la marca norteamericana Chevrolet en Europa. Como consecuencia de esta nueva estrategia, a partir del año 2005 los vehículos de Daewoo comenzaron a cambiar de nombre. Sin embargo, en Europa Chevrolet no debía limitarse únicamente a los utilitarios, sino que debía posicionarse como proveedor de toda una completa gama de automóviles. En las categorías más altas, además de los Sport Utility Vehicles (SUV) también se incluían monovolúmenes familiares, como los que Daewoo comercializaba desde el año 2000 con el Rezzo. Hasta el año 2007 el modelo continuó vendiéndose en Europa como Chevrolet Rezzo. En 2011 ya había disponible un sucesor que finalmente llegaría a los concesionarios con el nombre Chevrolet Orlando.

El Chevrolet Orlando ofrece siete plazas de serie

Como base del monovolumen compacto Chevrolet Orlando el constructor aprovechó la gama de berlinas Chevrolet Cruze, ya en el mercado desde 2008.  Pare este monovolumen de cinco puertas los surcoreanos y norteamericanos idearon una carrocería con reminiscencias de los Cross-over o todocaminos caracterizada por una estructura angulosa y una parrilla elevada. Con unas dimensiones de 4,65 metros de longitud y algo más de 1,83 metros de ancho, el Chevrolet Orlando presentaba las proporciones típicas de un miembro de su categoría. Sin embargo, para lograr el aspecto dinámico de un todocamino los constructores limitaron la altura de este monovolumen compacto a 1,62 metros. A pesar de todo, los hasta 7 pasajeros de las tres filas de asientos situadas en la parte trasera disponían de una libertad de movimiento a la altura de la cabeza de casi 10 cm. Con una configuración de plazas normal, el Chevrolet Orlando ofrecía un volumen del maletero de aproximadamente 460 litros. Con los asientos traseros abatidos el espacio de carga aumentaba hasta más allá de los 850 litros.

Las motorizaciones del Chevrolet Orlando

Al inicio de su andadura el Chevrolet Orlando disponía de un motor de gasolina y dos variantes diésel. El modelo de gasolina estaba equipado con un propulsor de 1,8 litros que generaba hasta 104 kW (141 CV) y estaba asociado a un cambio manual de cinco velocidades. En el apartado diésel el Chevrolet Orlando contaba con motores de 1,8 o 2,0 litros de 96 kW (130 CV) y 120 kW (163 CV), respectivamente. Todos los propulsores cumplían los requisitos impuestos por la norma de emisiones Euro 5. Según el fabricante, el diésel más pequeño del Chevrolet Orlando consumía una media de 6 litros de combustible a los 100 km, lo que suponían unas emisiones de CO2 de 159 g/km.