Saab 96

Durante su primera década en el mercado sufrió importantes cambios en su estructura. En 1965, la parte frontal fue ampliada para darle más espacio a un nuevo motor y el radiador fue dispuesto delante de este. En 1968, las ventanas frontal y trasera fueron ampliadas ligeramente. Además de los retoques estéticos, mientras se comercializó, al vehículo le fueron incorporadas distintas tecnologías para mejorar su rendimiento. A pesar de que no se produce desde 1980, el Saab 96 es un coche usado con mucha acogida entre los coleccionistas y aficionados a la marca.

El Saab 96, sus versiones y su notable actuación en competiciones

A lo largo de las dos décadas en las que fue comercializado, el auto tuvo varias versiones. Entre las más conocidas se cuentan el Saab 96 De Luxe, el Saab Sport y una edición limitada de color azul aguamarina que fue lanzada en 1979 para celebrar los 25 años de comercialización de la marca en los Países Bajos. Este coche fue conducido en muchas competiciones automovilísticas. Ganó el rally del Royal Automobile Club durante tres años consecutivos (1960, 1961 y 1962) y el Rally de Montecarlo en 1962 y 1963. Estos triunfos le valieron al Saab 96 la reputación de ser un vehículo confiable y resistente.

Especificaciones técnicas que hicieron del Saab 96 un coche sobresaliente en su época

Durante las dos décadas en las que estuvo a la venta, el Saab 96 contó con varios tipos de motor. El primero, de 750 cc. y 38 caballos de fuerza, tenía tres cilindros y dos tiempos. En 1963 el motor fue agrandado y pasó a tener 841 cc. y 40 caballos de fuerza. También se ofrecía una versión de 57 caballos, con carburadores triples y de inyección de aceite. Esta variante se usó en los modelos Sport y Monte Carlo. Para 1964 el motor fue modificado y pasó a tener 42 caballos de fuerza, mientras que en 1966 este número aumentó a 46. En 1967, la compañía empezó a comercializar el Saab 96 con un motor Ford Taunus V4 de cuatro tiempos y 1498 cc. que había sido construido inicialmente para el Ford Taunus 12 M de 1962 y que llegó a desarrollar 55 caballos de fuerza. Entre otros aspectos técnicos relevantes que caracterizaron a este vehículo se cuentan las palancas de transmisión y la caja de cambios, que en un principio era de tres engranajes, pero que luego pasó a tener cuatro velocidades. Se usaron amortiguadores telescópicos en las cuatro ruedas y se dispusieron en estas frenos de tambor en un inicio y frenos de disco en modelos posteriores. El coche dejó de fabricarse en enero de 1980 y en total, durante los años en los que fue producido, salieron al mercado alrededor de 550.000 unidades, muchas de las cuales se encuentran disponibles en la actualidad en el mercado de coches de segunda mano.