Jaguar D-Type

D-Type de Jaguar, innovación constante

El D-Type marcó una etapa automotriz porque su diseño aerodinámico fue evolucionado basándose en la industria de la aviación. De esta forma se logró un vehículo de carrera realmente veloz que supo aprovechar todas las ventajas de la aerodinámica. Entre sus méritos se encuentra el haber ganado las 24 horas de Le Mans tres veces seguidas desde 1955 a 1957. En total se han fabricado alrededor de 18 modelos de fábrica, 53 personalizados y 16 versiones de tipo XKSS. Por estos números, es muy difícil conseguir coches usados en buen estado de esta serie.

La ficha técnica del D-Type

La serie D-Type de Jaguar fue uno de los coches más veloces de la época. Sus seis cilindros ubicados en línea en forma longitudinal ofrecían una potencia máxima de 250 caballos de fuerza a un torque de 328 nanómetros. El bloque era de 3.442 centímetros cúbicos y con su combustión a gasolina lograba una velocidad máxima de 260 km/h. El peso total del vehículo era de 875 kg y tenía dimensiones de 3,9x1,6x1,2 metros. A este gran éxito le siguieron modelos como el C-Type y el Type E.

El XKSS, una variante al D-Type

Tras retirarse temporalmente de las carreras en 1956, la compañía decidió rematar las unidades sobrantes bajo el nombre de XKSS. Esta versión tenía un equipamiento diferente, como el asiento del acompañante, las ventanas en los laterales y un parabrisas ancho con marco, entre otras variantes. Algunos de estos diseños fueron usados como base para los coches de carreras que se producían en Estados Unidos.

Jaguar serie D-Type, el Santo Grial de los vehículos

Seguramente, encontrar coches usados del Jaguar D-Type es como encontrar una aguja en un pajar. Son muy pocas las unidades que quedan disponibles y sobre todo las que están en buen estado. Los escasos vehículos que quedan están en museos o en manos de coleccionistas privados que muy pocas veces quieren desprenderse de su pieza más preciada.