Citroen BX

La marca Citroën ha sido galardonada en varias ocasiones como mejor coche del año, tanto a nivel europeo, como nacional en diversos países. Además siempre ha destacado por su ambición en la competición al haberse proclamado en varias ocasiones campeón en diversas disciplinas como Rally WRC, WTCC o Rally Raid.

El Citroën BX fue el sucesor del Citroën GS y el predecesor del Citroën Xantía. Estaba encuadrado dentro del segmento D y cuando salió al mercado destacó por ser un vehículo con líneas muy angulosas y con la luneta trasera muy tendida. Este modelo fue diseñado por el italiano Marcello Gandini. Durante sus más de 12 años de producción se fabricaron un total de 2.315.739 unidades en todo el mundo. Compitió con en el mercado con su hermano menor, el Citroën ZX.

Dos carrocerías: una familiar y una berlina

Este modelo se presentaba con dos carrocerías una familiar y una berlina, ambas con cinco puertas. La berlina tenía una longitud de 4,23 metros, una anchura de 1,65 metros y una altura de 1,35 metros. Su distancia entre ejes es de 2,66 metros. El modelo familiar crecía respecto a la berlina situándose con una longitud de 4,44 metros, una anchura 1,68 metros y una altura de 1,38 metros. La batalla se mantiene con esta carrocería mientras que los pesos oscilan entre los 885 y los 1.280 kilogramos. Esta modelo, tuvo dos series o generaciones diferenciadas.

Motores gasolina con varias cilindras y potencias

La gama gasolina está compuesta por el motor 11, que con 1.1 litros de cilindrada rendía una potencia de 55 a 60 CV. El siguiente motor el 14, tenía 1.4 litros de cubicaje y una potencia de 60 a 72 CV. El 15, tenía un motor de 1,5 litros con una potencia de 74 a 88 CV. La versión 16 montaba un motor 1,6 litros con potencia de 90 a 95 CV. Y por último la versión 19 era el más potente, con un cubicaje de 1,9 litros y con unas potencias comprendidas entre los 105 y 160 CV.

Tres motores diésel, entre ellos un turbo

Los motores diésel que completan la gama son el motor 17, un motor de 1,7 litros y 60 CV, que también disponía de la versión turbo con el 17 Turbo Diésel que desarrollaba potencia de entre 90 y 92 CV y por último el más potente de los diésel fue el motor 19, un motor de 1.9 litros que desarrolla potencia de 65 a 71 CV. La oscilación en los caballos dependía de la fiscalidad de cada país.

Una difícil forma de nombrar a los modelos, con una nomenclatura larga y ambigua

La nomenclatura de las versiones era algo complicada respecto a lo que estamos acostumbrados hoy en día. Al nombre BX del modelo se le añadían un número de dos dígitos y una combinación de letras. La primera cifran indica la cilindrada del vehículo, mientras que las letras describen en nivel de equipamiento y motorización. Así pues los motores estaban divididos en cinco gasolinas y tres diésel.

Después del número del motor se muestra una letra o letras que muestran el nivel de equipamiento. Así la letra T, significa nivel mínimo de equipamiento; R, nivel básico; TG-TR, nivel intermedio de equipamiento; TZ, nivel máximo de equipamiento; y la versión GT era la máxima en equipamiento pero con matices deportivos. Y justo después se añade una letra que define las motorizaciones esta podía ser: E, S, I, D, D Turbo.

Tracción y trasmisión adelantadas para la época

Los Citroën BX disponen en su mayoría de tracción delantera y trasmisión de cinco velocidades, si bien también existió una versión 4x4, que aún puede encontrarse en mercados de ocasión. Ésta estuvo disponible en carrocería normal y break; el motor asociado en España era el 1.9 de 105 CV. En Europa también se combinó con el motor 19 GTi 123 CV. Existieron también variantes de caja automática, siendo ésta un clásico convertidor hidráulico de par con cuatro velocidades.

Equipamiento de lujo para los modelos más caros

El equipamiento que se puede encontrar dependiendo de las versiones varía desde aire acondicionado con reciclaje, elevalunas eléctricos delanteros y/o traseros, cierre centralizado, cuentarrevoluciones, dos guanteras con tapa, dirección asistida, llantas de aleación, faros delanteros antiniebla, faros halógenos o limpia parabrisas trasero. Los modelos más básicos carecían de todos estos extras.

Fiabilidad asegurada y versiones de rally

Según diversos organismos y particulares los modelos más fiables son el 1.4 litros de gasolina y 72 CV de potencia, además del codiciado 1.9 GTi de 123 CV y cualquiera de los motores diésel que no fuera la versión turbo que sí que solía causar algún problema. En el mundo de la competición deportiva y más concretamente en el mundo de los rallies, el modelo tubo dos variantes: el Citroën BX 4TC y el Citroën BX 4TC EVO.